Un día más, algo vuelve a cambiar, con la extinción de una realidad. Mi mundo. La novedad trata de arrebatar su palidez a la antigüedad. Nada más quedarán las imágenes que no se ven, las demás llegarán, sepultando los recuerdos sin comprender, dejando los misterios sin resolver. Buscando testigos de ritos perdidos, mi mundo en desaparición. Objetos de culto, indicios seguros de un mundo en desaparición. Mirando atrás, puedo planificar una misión para rescatar todo lo que fui. Vivo los detalles de decoración, modas que no tiene cotización, libros y revistas acumulados con postales sin valor. Al final como lágrimas en la lluvia se perderán, pasarán, el futuro borrará los héroes de ayer, dejando las leyendas sin comprender. No quiero ver ni saber lo que vendrá después, sin obedecer o admitir cambios forzosos, prefiero ver y tener otros tesoros y a los ídolos de ayer. La conexión con un guardián que en el pasado conservó la educación sentimental que mi memoria no olvidó. Un año más todo vuelve a cambiar, sin necesidad.
Mi letra favorita del momento.