A veces me da la sensación de que tengo que explicarme demasiado, cuando yo no le pido a nadie que se explique. Acepto lo que la gente hace, dice y pone, felicito por las cosas que me gustan y no digo nada sobre las que no me gustan, a no ser que alguien me pida mi opinión, no cuestiono lo que hacen, ni valoro sus trayectorias, sus proyectos o lo que sea que hagan. En cambio, yo debo explicarme. Debo decir porque abrí este blog, porque me puse este pseudónimo, porque no pongo fotos mías o porque escribo lo que escribo. Además, se me pregunta por mi edad, mi nombre real, mi formación y los trabajos que he desempeñado en mi vida. Puedo pensar que es mero interés, curiosidad pura y dura, pero en la mayoría de casos no lo es. Todos pretendemos juzgar y más cuando alguien, como es mi caso, se mantiene en un discreto anonimato. Pero no piensen que aparecí de la nada hace siete años. Lo he explicado centenares de veces. Empecé a escribir aquí porque me apeteció, porque quería tener un espacio alejado de mi vida laboral de aquel momento (que ha sido prácticamente la misma siempre) y quería evitar que ambos mundos se mezclaran. Y así he continuado hasta hoy. Todo resultaría más fácil -al menos para los demás, porque para a mí así lo es y bastante-, si hubiera aparecido aquí con mi nombre, mi curriculum, los datos de la universidad donde estudié y las fotos de la playa donde paso el verano. De esa manera, igual no tendría que explicarme tanto, pero desde luego, lo que estoy seguro es que este blog no hubiera durado más de un año. Si he llegado hasta este punto, que puede no parecer nada pero personalmente lo es, es gracias a vivir bajo unas gafas de Clark Kent que me han permitido moverme discretamente entre tanta Lois Lane. ¿Dónde me llevará esto? Pues no tengo ni idea. ¿Que llevo ya mucho tiempo escribiendo, y no solo aquí, y me gustaría que avanzara? Desde luego. ¿Que lo conseguiré? Pues difícilmente. ¿Que debería preocuparme menos por lo que la gente dice o hace? Sin duda. Pero sigo pensando que si yo tengo la prudencia de no preguntar, agradecería que los demás tuvieran la educación de no hacerlo. Y no continúo, que fuera está lloviendo y no hay nada que me guste más.
Muy fan de la entrada excepto ese «Difícilmente». Uno no puede ponerse trabas antes de empezar, chico. Mejor un «Ya veremos».
Batman es tan fascinante que todos se preguntan quién habrá detrás de la máscara. Pero lo curioso es que la fascinación viene por la máscara, si se resolviera el misterio, desaparecería el hechizo. El viejo dicho de la curiosidad mató al gato. Espero que continúen el misterio y el juego y la confusión durante mucho tiempo.
Nunca lei algo que me marcara como este» Cierta curiosidad por averiguar aunque no quiero ni preguntar».
Te sigo y sos el espejo de mi manera de pensar.
Hay un espacio que es necesario que sea solo para UNO.
Independientemente de nuestra manera de vivir y ver las cosas diarias , hay un rincon profundo que solo se comparte entre pares!
Te felicito y continua con tan buen blog.
Luis de Borbon
Elena francis, Batman, Charly, de los Angeles de Charly …y El hombre confuso
debería haber mucha más gente discreta, y celosa de su intimidad bien por esto último, o bien por poner un punto de «queseyo» «yoquesé» a la vida .Con loque presta un poquito de misterio.
y debería haber más gente confusa, que los hay con las ideas tan claras que dan
ahogos de tanta realidad. haces muy bien en ser o estar confuso y en el anonimato
yo a veces estoy confusa , y me gusta. como dice mi mejor amiga. Va boba va ¡¡