Los domingos son para pasarlos al aire libre, lejos del sofá, lejos de la televisión, lejos de María Teresa Campos. Cojan su mal humor, su resaca, su depresión y váyanse a la montaña. Cierren el after, pasen de los brunches, de los vermuts matutinos y de las comidas familiares. No Latineen, no vayan al rastro, no se dejen caer por la Barceloneta, olvídense de la playa, eso ya pasó. Nada de wifi, ni de 3G, ni twitter, ni samyroad. Abracen la naturaleza, déjense seducir por el trino de los pájaros y la brisa de los árboles. Hagan un picnic, una paella, asen carne, tuesten pan, coman ensalada, lo que sea, pero no se queden en casa, ¡no se quede en casa! Anoche se lo pasaron muy bien, ligaron, bebieron, se drogaron, pero ¿y hoy? ¿van a dejar que el domingo les pase por encima? ¿es ese su plan? Pues todavía están a tiempo de cambiarlo. ¡Háganlo! Nada les sentará mejor. Se lo prometo. Palabra de Confuso.