Debería empezar a meditar sobre los motivos que me llevan a encontrar ideales de belleza masculina únicamente en revistas que hace más de cuarenta años. ¿Será una moda promovida por el auge del manido vintage?. ¿Se trata realmente de una enfermedad?. ¿O simplemente debería abandonarlo todo y dedicarme, de una vez por todas, al fomento del retroerotismo?.