Observo con cierto estupor que esta época de chonismo ilustrado que vivimos con auténtico fervor no se extiende al resto de países europeos. Y no me refiero a que no sea capaz de encontrar una traducción decente de “tronista” al holandés, sino a la ausencia de ciclados, cejas depiladas y camisetas rosa con abundante escote entre la población masculino centroeuropea. ¿Debería Emma García hacer un Tronistas por el mundo para exportar la cultura MYHYV?. ¿Debería Miriam Sánchez coger sus maletas y empezar a abrir el mercado pokero por los fiordos noruegos?. ¿Debería dejarme yo de tonterías y montar una academia de tronistas para convertir a todos los escépticos?.
Creo que el calor empieza a pasarme una importante factura…