Siempre quiso flotar a media altura. Volar le parecía pretencioso, y arrastrarse por el suelo, una ordinariez. Elevar los pies y dejarse llevar. Anidar en árboles, destrozar nubes, luchar con tormentas, vencer las cadenas de la gravedad. Pensar que las personas son extrañas, que los pájaros son amables y que el frío no es tan intenso a unos metros sobre el suelo. Reir en la oscuridad, soñar en colores, flotar sin rumbo, olvidar los recuerdos. Inventar una nueva realidad, enamorarse del viento, dejar correr la sangre. Llorar sin saber porqué, mirar fijamente a los ojos de un periquito y saber que todo irá bien. Disfrutar plácidamente de una vida etérea.
El blog Confuso está más vivo que nunca, cuando me despisto, ya hay 3 post nuevos… que maravilla!!!
Más bien «miniposts», aunque de este último estoy muy satisfecho! 🙂
me encanta
Nada como un baño con un chorro caliente cayéndote en los hombros.
Por cierto, que miedo me ha dado siempre Truman en la foto de Warhol que incluyes en el post, parece Julian Beck en Poltergeist.